Fragmento

"Pierrot (Le fou) está visiblemente triste: ¿siente pena por las picias cometidas en París, o teme una venganza? Está arrancando los pétalos de unas flores de papel dorado, tirando los pedazos al viento crepuscular que se levanta...De repente, desde un poco más lejos, se escucha un rugido ensordecedor. La tierra tiembla, el rugido se transforma en trueno, y se escucha cada vez más cerca. Un león heráldico de melena dorada sale de detrás de un templete. Pierrot tira las flores restantes, y trata de salvar el pellejo, pero cuando intenta saltar por encima de la valla se queda enganchado como una navaja abierta a medias, y sus pantalones se rompen en mil pedazos con un crujido indecente. El león heráldico lo contempla durante un rato, con una sonrisa maliciosa, y después se quita los guantes, y de la manera más atroz, abusa de Pierrot suspendido e impotente...
El público se queda pasmado con tanto atrevimiento."